• marzo 18, 2024

Escrachan la casa de un presunto violador en Villa Devoto

Un grupo de aproximadamente 200 vecinos, pintaron y intentaron entrar a la casa de un supuesto violador en el barrio de Villa Devoto.

Rompieron vidrios, la puerta quedo destrozada y el frente todo pintado con diferentes leyendas como Violín, Violador, y otras cosas irre-reproducibles mas.

Todo comenzó, cuando una de las víctimas, de 12 años, se quebró en Nochebuena y le confesó a su familia los abusos que sufrió desde 2015.

Cuando todo parecía perfecto en la noche buena, una familia de Villa Devoto festejaba, feliz, la llegada de Papá Noel. Comida, fuegos artificiales y alegría.

El típico escenario de miles de personas en el barrio, pero de repente todo se vio inesperadamente interrumpido por la terrible confesión de un nene de 12 años, quien al no soportar más el dolor que cargaba en sus espaldas, le reveló a sus familiares que desde 2015 había sido violado por “Mukeño”, un vecino que conocen hace años y que vive a solo doscientos metros de la casa.

Fue un momento horrible, cuando el chico entre gritos y llanto, pidió hablar por teléfono con su tía para ahondar en los detalles. Insistió en la culpabilidad del vecino, mientras le pedía perdón a su familia por “arruinarles” la Navidad.

Finalmente lograron calmarlo y lo acostaron, fue en ese momento cuando todo cerro, y entendieron el cambio de actitud del nene en el último tiempo, por qué había quedado libre de la escuela y la razón por la que dejó de jugar con sus amiguitos del barrio.

“Ustedes me tienen que entender; no saben lo que me pasó… por eso nadie entiende por qué soy así de violento con ustedes: a mí me violaron”.

Sus familiares seguían sin comprender de qué hablaba. “Fue Mukeño. Me violó”, concluyó el menor antes de dormirse.

La mañana del 25, su tía lo fue a visitar y finalmente le reveló la totalidad del horror al que fue sometido.

El acusado es un joven de 26 años nacido en Uruguay, cuentan los vecinos que lo vieron crecer.

De hecho, era el mejor amigo del hermano mayor del niño abusado.

A pesar de que hace algún tiempo se mudó, últimamente en el barrio solía pasar por su casa para ir juntos al cyber.

“Mi sobrino me contó que cuando se quedaban sin plata, ‘Mukeño’ le ofrecía ir a seguir jugando en la computadora de su casa”, aseguró ‘Mecha’, la tía.

“Empezó a darle besos en la boca, a tocarle las partes íntimas y a encerrarlo en la habitación, lo tenía amenazado para que no hablara con nosotros, relató.

El nene le mostró conversaciones que mantuvo con “Mukeño” a través de Facebook.

En ellas, el joven le dijo que quiere ser “su papá”, le pregunta, por ejemplo, si tiene cámara para verlo o si la pasa bien cuando están juntos.

Indagó también que si alguien lee los mensajes que se mandan y hasta le planteó un plan de construirse una casa para vivir juntos.

La víctima casi no le respondió, salvo en el último chat al que accedió el matutino. “Si me querías tanto, ¿por qué me tocabas el pito?”, lo increpó el niño.

El martes pasado, los vecinos se concentraron en la casa de la madre del acusado (donde vivía “Mukeño”). Pintaron grafitis en la fachada y lo escracharon, le exigían que diera la cara y que hasta que no apareciera, no se iban a mover.

En medio de las protestas, otras personas se acercaron a Viviana, la mamá del nene, para denunciar que el uruguayo cometió otros avisos.

Minutos después, una de las abuelas del menor logró ver cómo el acusado trataba de escapar de terraza en terraza.

Finalmente se entregó en la comisaría 45°, con la excusa de que querían incendiar la casa de su madre.

Se confirmó también que “Mukeño” tiene una causa por abuso abierta en su contra pero que está libre.

Por medios de las redes sociales, los vecinos expresaron su repudio y publicaron fotos.

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