Villa Devoto, Una breve génesis de su origen

Si bien los barrios no pueden decirse que fueron fundados, salvo San José de Flores y Belgrano, que derivaron de sus respectivos Partidos en los alrededores del primitivo y modesto Buenos Aires. Villa Devoto, si bien no podemos afirmar que fue fundado, su creación deliberada, por su entidad impulsora que fue el Banco Inmobiliario, (entidad fundada en Abril de 1888), del cual don Antonio Devoto era su presidente, siguió ciertos pasos que se lo asemeja a una fundación..

En un extremo noroeste de la reciente federalizada Buenos Aires (1880) existía una amplia franja unitaria de tierras de propiedad de la Sucesión de la familia Altube, que se extendía desde las actuales avenidas Constituyentes, Francisco Beiro, Lastra y Mosconi, que salvo un sector que era el establecimiento lechero, denominado Tambo Lechuza, decidían vender.

A través de terceros las autoridades del Banco se enterarían de esa intención y se interesarían en adquirirlas.

Antonio Devoto, habría recorrido y observado la zona, comprobando la calidad de sus aguas, ser una zona alta y alejadas de las miasmas, por lo cual aconseja su compra, es así que en la reunión del Directorio de la entidad el 14 de Enero de 1889 propone la adquisición, opinión que es aceptada, y el 25 de Febrero se concreta su escrituración en un valor de dos millones de pesos.

Es así, que ya mensurado el terreno, un 4 de abril de ese mismo año, se presentan los planos para la creación de un “Nuevo Pueblo”, los mismos estaban firmados por Carlos Félix Buschiazzo y José Poggi, que con celeridad el entonces Intendente de la Ciudad, el Dr. Guillermo Cranwell, aprueba el 13 de Abril (Día del Barrio).

El nombre se deberá al apellido del presidente del Banco, ya que en aquellos años el apellido era garantía de responsabilidad y honestidad.

Este proyecto se da en un momento de gran auge de carácter especulativo en ventas de tierras, que tenían una gran demanda debido al explosivo crecimiento de la población, sobre todo por la fuerte inmigración que recibía nuestro país.

El diseño del mismo, se inspiró en concepciones modernas, como fue la reforma de Paris, con manzanas rectangulares, en vez de cuadradas del diseño colonial, con una

plaza central, donde partían los bulevares y las diagonales, sorteando inteligentemente las dificultados de las vías férreas paralelas que las recorrían, aprovechando los escasos accesos existentes, respetando los modernos criterios de higiene y modernidad.

El Banco a su vez donaba 1.680.000 m2 para apertura de calles y avenidas, sus arterias tendrán en un sentido el nombre de ciudades americanas, de las cuales solo sobrevivirán las de Asunción, Habana y Nueva York, la otra con distinta orientación tendrán nombres de ciudades europeas, en su mayoría italianas, pero no sobrevivirá ninguna de ellas.

Este ambicioso proyecto, seria por venta directa por parte del Banco, pero un serio traspié demorara su desarrollo. El país se encontraba en medio de una serie crisis económica y política durante el gobierno de Juárez Celman, que desembocara en la asonada cívico miliar del 26 de Julio de 1890 (Revolución del Parque), que a pesar de

su aplastamiento y detención de sus conductores, concluirá en la caída del presidente y su reemplazo por el vice, el Dr. Carlos Pellegrini. Serias serán las dificultades económicas, que sufrirá nuestro país, y ello afectara el desarrollo de nuestra Villa.

El Banco se reciclara en Compañía de Seguros, la original intención del mismo de ofrecer el acceso a las familias humildes para tener su casa propia, que les permitiera salir del hacinamiento de los conventillos, no prosperara.

Sin embargo, el hecho que de que accionistas del Banco, adquirieran importantes fracciones, donde algunos se instalarían en importantes residencias en forma permanente otros solo vivirán los fines de semana, además con la radicación de significativas sedes de entidades religiosas como el Seminario, el Asilo San Vicente de Paul, reavivará un lustro después el interés por la zona, a la que ayudara también las instalación del Club de Tiro al Segno.

El principio del siglo XX, con algún interregno durante la Primera Guerra Mundial, consolidara el desarrollo de la Villa, y acentuara, esa particular silueta y su propio clima pueblerino, muy parqueado y florido panorama que aún lo caracteriza.

En una visita que el Ministro Benito Carrasco hiciera al barrio, le llamaría la atención esas características, y dejaría una frase que con el tiempo se convertiría en nuestro lema, “Villa Devoto es un Jardín de Buenos Aires”

Agradecemos por el Material a la:

JUNTA DE ESTUDIOS HISTÓRICOS DE VILLA DEVOTO

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