Un nuevo espacio inclusivo y seguro en Villa del Parque
La Plazoleta Lindor Sotomayor, en el corazón de Villa del Parque, está atravesando una transformación que promete devolverle su espíritu de encuentro vecinal.
Con obras que apuntan a la accesibilidad, la modernidad y el juego inclusivo, este espacio histórico de la Comuna 11 se renueva para convertirse en un nuevo punto de referencia para las familias y la infancia del barrio.
Queremos que los chicos y chicas del barrio puedan disfrutar de un espacio seguro, moderno y pensado para todos. La renovación de la Plazoleta Lindor Sotomayor es parte de un plan que busca fortalecer los espacios públicos como lugares de integración, explicó un integrante de la Comuna 11 al ser consultado por el avance de las obras.
Ubicada sobre la calle Jáchal al 3500, la plazoleta lleva el nombre de Lindor Sotomayor, un educador y funcionario público cuya figura remite al valor del conocimiento y la enseñanza.
Durante años, el pequeño pulmón verde fue punto de encuentro para las familias, los abuelos con sus nietos y los alumnos de la cercana Escuela Primaria N° 10.
Sin embargo, el paso del tiempo dejó su huella: los juegos metálicos se oxidaron, el arenero quedó en desuso y el diseño del lugar ya no respondía a las necesidades de las nuevas generaciones.
La intervención actual tiene como objetivo revertir esa situación con una puesta en valor integral del sector de juegos, apostando a la inclusión y la seguridad.
Según informaron fuentes del área de Espacio Público, el nuevo equipamiento será totalmente renovado e incluirá propuestas adaptadas a distintas edades y capacidades motrices.
Se reemplazará el viejo arenero por un solado de caucho EPDM, un material antideslizante, amortiguante y de bajo mantenimiento, elegido por su durabilidad y por ofrecer mejores condiciones higiénicas y de seguridad.
El proyecto incorpora además un diseño temático que pone el foco en la identidad barrial. En el suelo se desplegarán formas y colores inspirados en la lechuza de campanario, un ave típica de la fauna urbana que simboliza la sabiduría.
Este guiño no es casual: busca rendir tributo a Lindor Sotomayor y fortalecer el vínculo entre el espacio verde y la comunidad educativa del entorno.
La idea es que los chicos aprendan jugando, reconociendo su entorno y su historia, en una plazoleta que también los invite a reflexionar sobre el valor del conocimiento y la naturaleza.
Los nuevos juegos, de diseño contemporáneo, invitarán a la exploración y al trabajo en equipo, incorporando rampas, plataformas y estructuras inclusivas que permitirán la participación de todos los niños, sin importar sus capacidades físicas.
La disposición de los sectores, además, fue repensada para mejorar la circulación y la convivencia entre los distintos grupos etarios, con espacios para acompañantes y zonas de descanso con bancos ergonómicos y sombra natural.
Desde el Gobierno porteño destacan que esta obra forma parte del programa de renovación integral de espacios públicos en distintos barrios, que busca fomentar la vida al aire libre y la participación comunitaria.
En los últimos años, más de 60 plazas y plazoletas de la Ciudad fueron intervenidas con criterios similares de accesibilidad e inclusión, en línea con los estándares internacionales de urbanismo sostenible.
Los vecinos de Villa del Parque celebran esta renovación. “La plazoleta siempre fue un lugar de encuentro, pero ya se veía vieja.
Es muy positivo que la actualicen y que piensen en todos los chicos, incluso los que tienen alguna discapacidad. Es una forma de construir comunidad”, señaló María, vecina de la calle Nazarre, mientras observaba los avances de las obras desde la vereda.
El impacto de estas intervenciones va más allá de lo estético. Estudios del Ministerio de Espacio Público señalan que los espacios verdes con equipamiento inclusivo fomentan la integración social, reducen el sedentarismo infantil y promueven la convivencia intergeneracional. Además, el uso de materiales sustentables y de bajo mantenimiento representa un ahorro en costos a largo plazo y una mejora en la gestión ambiental urbana.
En este sentido, la renovación de la Plazoleta Lindor Sotomayor se inscribe también en la tendencia global de “ciudades para la niñez”, un concepto urbano que promueve la creación de entornos donde los más pequeños puedan explorar, aprender y participar activamente del espacio público.
Buenos Aires, que ya ha recibido reconocimientos internacionales por su política de parques temáticos y accesibles, sigue consolidando ese camino con proyectos como este.
La expectativa de los vecinos crece a medida que las obras avanzan. Se estima que los trabajos concluirán antes del verano, y que el nuevo espacio será inaugurado con una jornada comunitaria abierta, que incluirá actividades culturales, juegos y espectáculos para toda la familia.
El renovado parque no solo sumará equipamiento, sino que también recuperará el valor simbólico de un espacio que forma parte de la historia afectiva del barrio.
La nueva Plazoleta Lindor Sotomayor no será solo un sitio para jugar, sino un punto de encuentro, de memoria y de pertenencia. Un espacio donde cada risa infantil recordará que la ciudad también se construye desde sus rincones más pequeños, con el valor de mirar hacia adelante sin olvidar sus raíces.
 
                             
						                     
                 
         
                                     
                                     
                                     
                                     
                                    