Nuestro Colega de Flores de Papel hoy en Clarín
Desde Devotohoy.com.ar Felicitamos a nuestro Colega y amigo Roberto D Anna por la excelente nota que salio hoy en el Diario Clarín.
Aparte de ser un reconocido periodista Barrial, Roberto tiene un jovi que piensa algún día transformarlo en lo que hoy es un Sueño.
Con su ultimo trabajo, reflejado en su último libro, “Flores siempre es bello”, busca recuperar la historia del barrio.
Patrimonio porteño
“La gente, sin darse cuenta, tiró parte de la historia del barrio”, dice Roberto D’Anna. Y él, en su colección de 1.000 fotos, 400 medallas y otros documentos y objetos sobre Flores, ayuda a rescatarla.
“Hay pedacitos de esa historia en cualquier lado. En el Parque Rivadavia de Caballito, en la feria de San Telmo o en manos de un particular que vive en París, por ejemplo.
No necesitas viajar para comprar esas joyitas: a través de Internet podes encontrar postales antiguas de la Basílica que alguien le mandó a un pariente que vivía en el exterior, afiches o un viejo programa de un teatro”, explica D’Anna a Clarín.
Y hay que creerle: D’Anna también es vecino de Flores y creador y director del periódico Flores de Papel desde 1999.
Además, acaba de publicar Flores siempre es bello. Barrio de colección, un recorrido por la historia del lugar, realizado junto con la periodista Natalia Rivarola y editado por La Conjura de las Artes.
Ese volumen se sumó a San José de Flores, el barrio de los locos (2008) y Vivir en una casa municipal del barrio de Flores (2009).
Coleccionista serial
Es que hay barrios porteños inagotables. Barrios en los que caben mundos. “Existen siete Flores”, como dice siempre D’Anna, como alguna vez escribió.
“Están el centro; la zona VIP o de las ex casas municipales; la de la Autopista; la de la villa 1-11-14; la del sur, vecina de la anterior, con humildes progresos; la de las vías, donde conviven edificios y casas tomadas, y el norte, invadido por el centro comercial Avellaneda, con talleres de costura clandestinos y prostitución”, enumera.
-A medida que se volvió un vecino-especialista, ¿en qué cambió su mirada sobre el barrio?
-Conocí otros Flores, además de los actuales. Vi el esplendor de Flores, los palacios de avenida Rivadavia, por ejemplo, mucho de lo que se perdió. Me da tristeza, sí. Y mi trabajo es una forma de acercame a cómo era, de vivir otras épocas que me hubieran gustado.
Porque es cierto que Flores decayó, que hay zonas que tocaron fondo. Pero igual “Flores siempre es bello”, como puse en el título del libro, y con lo que hago quisiera contribuir a que lo reconozcamos. La síntesis de todo es eso: conocer para cuidar.
D’Anna cuenta que su colección sobre el barrio tiene más de 18 años y unas 4.000 piezas, y que además de haber impulsado los libros, le trajo un “sueño posible”: abrir un museo del barrio.
“Es que soy un coleccionista raro -dice, y se ríe-. Me gusta divulgar de forma masiva, no guardar ‘tesoros’ bajo cinco llaves. O sea, que lo que encontré sirva para acercarse a la historia y para incentivar a los demás a entender y valorar. Ya tengo algunas ideas de cómo organizar el museo”.
-¿Cómo sería?
-Podría funcionar en alguna de las ex casitas municipales y tendría una habitación para la historia del Papa Francisco -Bergoglio nació en el barrio-, otra para Perón -quien vivió allí- y un espacio para sus escritores -Arlt, Baldomero Fernández Moreno, César Aira y Canela, entre otros-.
Lo visitarían vecinos, turistas, alumnos de las escuelas del barrio. El material está.
El mantenimiento se podría financiar perfectamente con la entrada. Falta encontrarle lugar. Y en búsqueda de eso, asegura, también anda.