Buenos Aires celebra su primer semana del patrimonio
Del 10 al 16 de noviembre, se llevará a cabo la primera Semana del Patrimonio de la Ciudad de Buenos Aires, un evento dedicado a fomentar el cuidado y la valoración del patrimonio cultural porteño, tanto material como inmaterial.
Esta iniciativa busca promover el acceso de los vecinos a los bienes culturales, desde la arquitectura emblemática hasta las tradiciones e imaginarios urbanos que forman parte de la identidad local.
Durante seis días, se ofrecerá una programación diversa con actividades para todos los públicos: conferencias, charlas, talleres, recorridos técnicos, visitas guiadas a edificios patrimoniales y sitios arqueológicos, y espacios normalmente cerrados al público, también se organizarán experiencias especialmente diseñadas para niños y adultos.
Este evento es organizado por el Ministerio de Cultura de la Ciudad, alineado con la Ley 1227, que establece un marco normativo para la preservación, investigación, y transmisión del patrimonio cultural.
La Semana del Patrimonio comenzará el 10 de noviembre, en coincidencia con el Día de la Tradición (190 años del nacimiento de José Hernández), y concluirá el 16 de noviembre, fecha que conmemora el Día Internacional del Patrimonio Mundial.
La Dirección General de Patrimonio, Museos y Casco Histórico de la Ciudad de Buenos Aires invita a todas las instituciones culturales, tanto públicas como privadas, a participar activamente de la primera edición de la Semana del Patrimonio.
El objetivo de esta convocatoria es fortalecer la identidad porteña, promoviendo su divulgación y protección a través de la participación ciudadana.
El evento ofrece un espacio abierto para incluir diversas actividades que resalten el patrimonio cultural de la Ciudad.
Entre las propuestas que las instituciones pueden presentar se encuentran charlas exclusivas, talleres magistrales, visitas especiales, aperturas de espacios usualmente cerrados al público, espectáculos únicos, exposiciones site-specific, workshops y clases especiales, entre otras.
Todas estas iniciativas se integrarán a la programación oficial con el fin de enriquecer la oferta cultural.
La participación en este evento no solo permite compartir la riqueza del patrimonio porteño, sino que también refuerza la importancia de la preservación cultural en un contexto de desafíos globales como el cambio climático, los conflictos y la división social.
En palabras de Ernesto Ottone Ramírez, subdirector general de cultura de la UNESCO: “Preservar el patrimonio no es un lujo, es una condición indispensable para garantizar que nuestro mundo no sucumba ante los desafíos actuales.
Es el vínculo entre nuestro pasado y nuestro futuro; lo que une a las personas. Es fundamental otorgarle a la cultura y al patrimonio la relevancia que merecen.”
Este tipo de iniciativas fortalecen el tejido cultural de la Ciudad de Buenos Aires, promoviendo la conexión de los ciudadanos con su historia y legado, al tiempo que se impulsa una mayor conciencia sobre la importancia de conservar estos bienes para las generaciones futuras.
Ernesto Ottone Ramírez es un destacado profesional chileno en el ámbito de la cultura, con una sólida trayectoria tanto en su país como a nivel internacional.
En marzo de 2018, fue nombrado Subdirector General de Cultura de la UNESCO. Antes de asumir este rol, Ottone fue Ministro Presidente del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de Chile, y luego Ministro de las Culturas, las Artes y el Patrimonio en el gobierno chileno.
Su experiencia abarca la representación de Chile en diversas instancias técnicas internacionales, especialmente en temas de patrimonio y museos, siendo uno de los miembros fundadores del Programa Ibermuseos.
Además, ha trabajado en la expansión de políticas culturales en América Latina, asumiendo la presidencia del Consejo del Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe.
Como Subdirector de Cultura en la UNESCO, Ottone ha liderado iniciativas que promueven la preservación del patrimonio cultural, considerando la cultura como un pilar esencial para enfrentar desafíos globales como el cambio climático y las divisiones sociales.
La UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) es una agencia especializada de la ONU creada en 1945 con el objetivo de promover la paz y la seguridad a través de la cooperación internacional en educación, ciencia, cultura y comunicación.
Su misión central es contribuir a la construcción de sociedades inclusivas y sostenibles, fomentando el diálogo intercultural, el respeto por los derechos humanos, y el acceso igualitario a la educación y el conocimiento.
Objetivos principales:
Educación: Impulsar la educación de calidad para todos, con el objetivo de lograr la alfabetización universal y el acceso a la educación básica, secundaria y superior.
Ciencia: Promover el desarrollo sostenible mediante la cooperación científica, incluyendo la protección de los océanos, el cambio climático y el acceso equitativo a los avances científicos.
Cultura: Proteger y conservar el patrimonio cultural y natural en todo el mundo, como sitios arqueológicos, tradiciones orales y lenguas en peligro de extinción.
La Lista del Patrimonio Mundial es uno de sus programas más conocidos, que identifica y protege sitios de valor universal.
Comunicación e información: Defiende la libertad de prensa y la igualdad en el acceso a la información, promoviendo medios de comunicación independientes y el acceso a las tecnologías digitales.
Iniciativas clave
Patrimonio Mundial: Un programa dedicado a la conservación de sitios de importancia cultural y natural en todo el mundo, como Machu Picchu, las Pirámides de Egipto, y el Parque Nacional de Iguazú en Argentina.
Educación para el Desarrollo Sostenible (EDS): Esta iniciativa busca integrar la sostenibilidad en los sistemas educativos de todo el mundo.
Programa sobre el Hombre y la Biosfera (MAB): Fomenta la sostenibilidad entre las actividades humanas y los ecosistemas mediante la creación de reservas de biosfera.
Rol internacional
La UNESCO también desempeña un papel clave en la resolución de conflictos a través de la educación y el diálogo cultural, y ha sido fundamental en la promoción de acuerdos internacionales para la protección del patrimonio cultural en zonas de conflicto.
Con sede en París, la UNESCO cuenta con 195 Estados miembros, y colabora activamente con gobiernos, organizaciones internacionales, universidades y ONGs para cumplir sus objetivos.