La ciudad donó los primeros ómnibus a las escuelas porteñas
Los primeros colectivos de la ciudad, fueron donados a las escuelas por medio de las asociaciones de vecinos y cooperadoras escolares, con la colaboración del personal directivo y docente.
Cuando estas reliquias comenzaron a circular, el servicio de ómnibus escolar tuvo como objetivo principal el traslado de alumnos dispersos por la geografía Argentina para que asistieran a cursar en las escuelas.
Los omnibus donados, fueron utilizados en los colegios de la Ciudad para las salidas didácticas y las observaciones directas de la naturaleza.
Según El Monitor de la Educación publicado en 1939 la Escuela primaria 22 del barrio de Devoto recibió un ómnibus para excursiones mediante donación.
Llevando a cabo, con los elevados fines que persiguen las instituciones cooperadoras e interpretando la dificultad económica que implica, para los alumnos necesitados, la participación en las excursiones escolares, la Asociación Juan Martín de Pueyrredón, conjuntamente con los Amigos de la Escuela y el personal directivo y docente de la Escuela N.° 22 del Consejo Escolar 17°, han ofrecido al Consejo, en carácter de donación y libre de todo gravamen un ómnibus para excursiones escolares.
El colectivo escolar, tiene capacidad para transportar 30 alumnos y correrán por cuenta de los donantes los gastos que demande su funcionamiento, combustible, garage, conducción, composturas, etc.» (El monitor de la educación común (1939) Consejo Nacional de Educación).
Por su parte, los inspectores escolares no descartaron ningún medio de locomoción. Camiones, carretas, mulas y caballos, ómnibus, y automóviles o lo que pudieran implementar para que los estudiantes asistieran a las aulas en zonas rurales y suburbanas, siempre que sean seguros y no representara un alto costo económico.
De esta forma lo expresaban en 1942, no se me escapa, tampoco, la posibilidad de establecer el servicio de transporte con vehículos propios de la región, de construcción original y local, adaptados a la naturaleza y a los caminos rudimentarios de la zona.
La innovación del sistema, por consiguiente, no implica la utilización de los medios más modernos y evolucionados, sino de los más prácticos y seguros». (Educación Común en la Capital, Provincias y Territorios Nacionales (1942) Consejo Federal de Educación).
El transporte escolar resolvía varias de las dificultades que preocupaban a las autoridades educativas, como el ausentismo y la deserción escolar, sin los riesgos derivados de la variaciones climáticas y de la soledad de los caminos; crea en los niños, por imperio de la sistematización y de la rigidez horaria, el hábito de la puntualidad; prolonga fuera de la escuela el sentimiento gregario natural del niño, con la comunidad del viaje y sus alternativas; vincula en forma regular la familia a la escuela por virtud del propio servicio oficial a cargo de vecinos e idealmente, bajo el control de las sociedades cooperadoras, estableciendo así un nuevo nexo de interacción en la educación de la infancia; y, para no enumerar otras ventajas», de este modo lo explicó el Consejo Nacional de Educación en un informe.
Educación Común en la Capital, Provincias y Territorios Nacionales (1942) informe presentado al Ministerio de Justicia e Instrucción Pública por el Consejo Nacional de Educación
Las escuelas también necesitaban del traslado de muebles, útiles y material didáctico para el desarrollo de las clases.
En 1939 Distribuir de inmediato las escuelas de Mendoza, los bancos escolares que se hallan en buenas condiciones, atendiendo el gasto con Ia partida de “Transporte de Material Escolar”, que al efecto dispone la Inspección Seccional» (El monitor de la educación común (1939) Consejo Nacional de Educación).
Cada inspector escolar para solicitar servicio de transporte escolar a la Inspección General debía completar los siguientes datos, n° de la escuela; localidad; inscripción y asistencia media actual; número de secciones o grados; número del personal docente.
Croquis de la casa escolar y plano de ubicación de la escuela dentro de la zona de influencia, con indicación del vecindario a beneficiarse y número de los niños en edad escolar.
Itinerario del proyectado servicio de transporte colectivo, con los caminos o sendas de acceso por los niños a beneficiarse, presupuestos de transporte: a) Sistema de locomoción: carro, automotor, lancha, etc. b) Costo diario y mensual. c) Horario del servicio.
Colaboración vecinal en el servicio. Determinar la especie y costo de esta contribución, todo otro dato que contribuya a ilustrar con mayor claridad esta propuesta.
(Educación Común. 1942. Educación Común en la Capital, Provincias y Territorios Nacionales 1942: informe presentado al Ministerio de Justicia e Instrucción Pública por el Consejo Nacional de Educación).